La formación del futuro se asemeja a la formación
del condicional. Se forma el futuro de los verbos
que terminan en -er o -ir añadiendo la terminación
que corresponde al infinitivo. Si el verbo termina
en -re se quita la e y se añade la terminación
que corresponde a lo que queda. En los verbos que
terminan en –oir, este -oir se convierte en
un simple r. El futuro se distingue, como en español,
del condicional sólo por las terminaciones.